En la corrida aplazada del pasado domingo día 3 para ayer, en Medina de Pomar, se conjuraron el buen estado que atraviesa Domingo y la calidad de un toro de Bañuelos.
El resultado final no podía ser otro que el de volver al campo con el perdón concedido y el del éxito de un torero que tarde a tarde está demostrando que quiere volver a estar arriba, junto a los grandes.
Fue una tarde en la que destacó por encima de todo, un buen encierro y un gran torero.
Los pupilos de Bañuelos derrocharon en general bondad y clase. Destacaron primero, tercero y sexto, además del cuarto que se ganó la vida, número 62 y de nombre 'Derrotado'. A este astado, López-Chaves lo supo entender desde el principio. Demostró bravura en el caballo y fue siempre de menos a más, algo que Chaves supo aprovechar. Destacó el toreo en redondo. Su trasteo fue abundante, ligado y lleno de clase y maestría. Al final el revuelo. Pañuelo naranja y 'Derrotado' en esta ocasión venció. Dos orejas y rabo simbólicos que el torero ledesmino paseó entre el clamor popular.
Antes, en el primero, también estuvo a lo grande Chaves. Toreó templado y se ganó las orejas que perdió por el acero, sino, hubiera sido aún mayor el éxito de la tarde.
Sin duda alguna éste es un premio a una temporada en auge, siempre a más, que a resultado ser la muestra de que Domingo quiere volver a estar arriba, quiere volver a contar para la ferias, y con tardes como esta, amén que lo está consiguiendo.
Ahora le queda el festival en Chinchón, el martes, y Zaragoza.
¡Ojo! que Domingo viene arreando muy fuerte.
Foto: mundotoro.com
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